sábado, 22 de septiembre de 2012

CUANDO LOS ARBOLES NO DEJAN VER EL BOSQUE

Declaración del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA)
en el Día internacional contra  los monocultivos de árboles
21 de septiembre de 2012

Jamás se ha visto un copihue en una plantación de pinos o de eucaliptus, porque el país al que hemos brindado y llamado Chile durante toda esta semana, hace tiempo que ha dejado de brotar en las políticas públicas. Por eso, ante la nueva fórmula denominada decreto 702 (Modificación a la Ley de Fomento Forestal), que pretende seguir dando  sustento legal a un criminal modelo forestal,  declaramos:

1.   Rechazamos el DL 702 que da continuidad al 701 que por 40 años ha subsidiado el 50% de los casi 3 millones de hectáreas de pinos y eucaliptus que invaden el sur del país para ganancia enteramente particular y privada.

2.   Resulta vergonzoso que el gobierno pretenda aplicar el Convenio 169 de la OIT en el proceso de construcción del DL 702, realizando una consulta a las comunidades mapuches con preguntas intencionadas, sin abordar todos los aspectos de la ley y sin considerar las denuncias históricas que el pueblo mapuche ha realizado contra el modelo forestal, mismo que motivó el criminalizado movimiento de recuperación de tierras, como respuesta desesperada a la condena a muerte que se les impone cotidianamente.


3.     Exigimos que el gobierno hable claro, plantaciones no son bosques, no pueden seguir insultando nuestra inteligencia. Energía renovable, no es quemar desechos forestales para producir energía que les permita seguir depredando, o aún mejor, transformar esa energía en bonos de carbono que permita a otras industrias más contaminantes comprar el derecho a contaminar. “Servicios ambientales” no es plantar árboles que serán cortados en 20 años disfrazándolos de sumideros de carbono. Toda esta peligrosa terminología que viene en el DL 702 enmascara la sed de ganancia y de acumulación a cualquier costo de los grupos económicos que están detrás del negocio forestal.

4.   Los impactos devastadores son hoy tristemente evidentes. Provincias como Malleco, donde llueve copiosamente, debe distribuir todos los veranos agua en camión en aljibes a sus comunas, porque desde el 2002 las cuencas están colapsadas frente a la demanda hídrica de los monocultivos. El uso de plaguicidas y agrotóxicos para el control de plagas ha contaminado la vida de cientos de comunidades que padecen alergias, afecciones respiratorias, cáncer y otras enfermedades antes inexistentes en el territorio. La autonomía y la soberanía alimentaria que sostenía a la vida campesina, mapuche y no mapuche, hoy también está en extinción, las tierras acidificadas no permiten buenas cosechas, el agua no alcanza, los bosques ya no traen la flora y la fauna que antes era parte de la dieta básica local. Los suelos fértiles de bosques milenarios son arrastrados diariamente a los mares producto, entre otros factores, de las tala rasa, la compactación y la impermiabilización que las plantaciones exóticas a gran escala traen consigo. Este tipo de modelo de desarrollo, sepulta la sustentabilidad país.

5.    Un modelo forestal realmente sustentable debiera promover y subvencionar la plantación de especies nativas para recomponer los ecosistemas devastados, debiera fomentar la descentralización de la propiedad, el diálogo entre agricultura y silvicultura, la recuperación real de tierras degradadas y erosionados, y no seguir promoviendo como hasta ahora la degradación intencionada para justificar luego la siembra y el negocio.

6.     Es imprescindible que las comunidades nos empoderemos frente a esta cultura depredadora que nos quieren imponer, los derechos nuestros y de las generaciones que vienen están en juego, no podemos permitir que leyes antidemocráticas sigan definiendo nuestro destino. Como vivamos y comamos en los próximos años dependerá de la organización, no solo de los productores campesinos y mapuches, sino de toda la comunidad consumidora, quienes no queremos depender de grandes grupos económicos,  industrias  transnacionales de alimentación y cadenas de supermercados.

OLCA exige que antes de aprobar nuevas leyes que comprometan el bienestar colectivo, se realicen estudios serios y evaluación rigurosa  de los brutales impactos sociales, culturales y ambientales que ha traído consigo el modelo forestal hijo del DL 701.


Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales – OLCA

Santiago, 21 de septiembre de 2012


Videos campaña contra la expansión forestal en Chile
Mapuexpress – Campaña – Spots. ¡NO MÁS INTRODUCCIÓN DE PLANTACIONES FORESTALES!