El 25 de octubre se informó la detención de seis integrantes del comando que había actuado en el ataque: Carlos Ríos Bassi, Richard Ledezma Plaza, Miguel Ángel Colina, Manuel Araneda González, José Luis Donoso Cáceres y José Ugarte González. Todos habían sido capturados el día anterior y sometidos a torturas.
El 30 de octubre se encontraron los cuerpos sin vida de Raúl Pellegrin y Cecilia Magni, flotando en las aguas del río Tinguiririca. Según los informes de autopsia los cadáveres presentaban lesiones contusas y huellas de aplicación de electricidad. Ambos eran los comandantes del grupo.
Los informes médicos señalaron además que la causa de las muertes fueron asfixia por sumersión en agua y contusiones torácicas dorsales, las que se aplican por acción de instrumentos contundentes dada su profundidad y la ausencia de lesiones externas.