Somos Carla e Iván, estamos hace más de 100 días en
las jaulas, cuando nos sumergimos en el mundo espeso de las cárceles –
una mañana soleada del 16 de abril. Nos dijimos “Bienvenidos a la
máquina de moler carne humana” y aún hoy nos mantiene boquiabiertos esta
cruda constatación. La cárcel es muy fea y el poder es tenaz contra los
prisioneros políticos.
Objeto de un golpe represivo, inescrupulosamente ventilados,
permanecemos íntegros, seguros, juntos e interminables a pesar de los
pesares. Hemos sido testigos de cómo trasciende el castigo a nuestras
familias y cercanos. Entre tanto vivimos el tiempo viscoso de las
prisiones de la mejor forma que somos capaces.
Si aceptáramos responsabilidad terrorista sobre los hechos que se nos
imputan saldríamos a la calle hoy mismo, pero creemos que nadie en su
sano juicio y con un poquito de sangre en las venas sería capaz de
afirmar: “Sí, soy terrorista”, “me apasiona el terror colectivo de la
población”, “sistemáticamente planifico y ejecuto acciones que tienden a
deteriorar los Derechos Humanos”.
La Ley Antiterrorista no es más que la expresión aguda del
Estado-fascista, su aplicación ha sido siempre en el sentido del temor
de los ricos a que se agote su festín, pues a los ricos les da miedo
todo, la autodeterminación de un pueblo antiguo como la tierra, le da
miedo la libertad, lo disconforme, y sobre todo le teme a quien no le
teme.
No nos tiembla la mano al negarnos a firmar un procedimiento
abreviado, aunque ésta decisión nos signifique prolongar nuestra estadía
en la cloaca de esta sociedad carcelaria.
Entre éstas cerraduras atraviesan ases de luz del brillo
inconfundible de la solidaridad, que mantiene la llama al fondo de la
mirada.
Gracias y tranquilidad que aquí vamos con un ojo en la nuca.
Nunca tendremos dueño.
Fuerza a la infancia mapuche.
Fuerza y amor a nuestros niños y nuestros amores.
Entre nosotros más fuerza y más fuerza.
Libertad a los presos políticos del mundo.
Fin a la Ley Antiterrorista.
Fuerza a la infancia mapuche.
Fuerza y amor a nuestros niños y nuestros amores.
Entre nosotros más fuerza y más fuerza.
Libertad a los presos políticos del mundo.
Fin a la Ley Antiterrorista.
Carla Andrea e Iván Darío,
Presos por luchar.
C.P.F Santiago
C.D.P Santiago Uno
Santiago de Chile. Principios de agosto 2012.
Presos por luchar.
C.P.F Santiago
C.D.P Santiago Uno
Santiago de Chile. Principios de agosto 2012.