La definicion de la locura es hacer repetidas veces lo mismo y esperar resultados diferentes.
El golpe de estado contra el democraticamente electo Presidente Fernando Lugo en el Paraguay pone en evidencia la incapacidad de los movimientos progresistas latinoamericanos de aprender de su propia historia. El presidente Lugo lidereo un movimiento politico que alcanzo el poder y desde el poder realizo importantes cambios a favor de la clase media y trabajadora del Paraguay en las areas de vivienda y salud. Esos cambios no fueron vistos con Buenos ojos por los parlamentarios del Partido Colorado que alberga a los personeros del Stroessnismo. El partido Colorado, el partido de Raul Cubas y Lino Oviedo, previa aprobacion de los cuerpos castrenses, ejecuto un golpe de estado burdamente coreografiado como "juicio politico." La falla del movimiento lidereado por Lugo estuvo en no crear un ejercito regular dispuesto a defender las reformas alcanzadas por su gobierno.
No aprendimos nada de la experiencia de La Unida Popular en Chile donde Pinochet, financiado y alentado por los Estados Unidos, derroco al gobierno democraticamente electo de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973. Allende fue advertido por Carlos Altamirano(partido socialista) y Miguel Enrique(MIR), entre otros, de la necesidad de crear un resistencia armada viable a los planes golpistas de la derecha chilena fianciada por Estado Unidos que se hicieron pateticamente obvio con el tanquetazo el 29 de junio de 1973. Allende, gran hombre, pero sujeto a las mismas limitaciones provinciales de la epoca y la geografia, aposto a favor de la alegada constitucionalidad del ejercito chileno y desatendio las advertencies de Altamirano y Enriquez. El resultado fue el golpe militar y del 11 de septiembre de 1973 de cuyas secuelas chile aun no se recupera totalmente.
El golpe de estado contra el democraticamente electo Presidente Fernando Lugo en el Paraguay pone en evidencia la incapacidad de los movimientos progresistas latinoamericanos de aprender de su propia historia. El presidente Lugo lidereo un movimiento politico que alcanzo el poder y desde el poder realizo importantes cambios a favor de la clase media y trabajadora del Paraguay en las areas de vivienda y salud. Esos cambios no fueron vistos con Buenos ojos por los parlamentarios del Partido Colorado que alberga a los personeros del Stroessnismo. El partido Colorado, el partido de Raul Cubas y Lino Oviedo, previa aprobacion de los cuerpos castrenses, ejecuto un golpe de estado burdamente coreografiado como "juicio politico." La falla del movimiento lidereado por Lugo estuvo en no crear un ejercito regular dispuesto a defender las reformas alcanzadas por su gobierno.
No aprendimos nada de la experiencia de La Unida Popular en Chile donde Pinochet, financiado y alentado por los Estados Unidos, derroco al gobierno democraticamente electo de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973. Allende fue advertido por Carlos Altamirano(partido socialista) y Miguel Enrique(MIR), entre otros, de la necesidad de crear un resistencia armada viable a los planes golpistas de la derecha chilena fianciada por Estado Unidos que se hicieron pateticamente obvio con el tanquetazo el 29 de junio de 1973. Allende, gran hombre, pero sujeto a las mismas limitaciones provinciales de la epoca y la geografia, aposto a favor de la alegada constitucionalidad del ejercito chileno y desatendio las advertencies de Altamirano y Enriquez. El resultado fue el golpe militar y del 11 de septiembre de 1973 de cuyas secuelas chile aun no se recupera totalmente.
No aprendimos nada del reciente golpe
de estado contra Manuel Zelaya en Honduras y dolorsamente ignoramos la
experiencia del movimiento bolivariano en Venezuela donde un ejercito
denfensor del pueblo le hizo frente y paro el golper militar contra el
Presidente Chavez en el 2002.
La leccion a aprender es simple: si seguimos armados de optimismo emprendiendo reformas beneficiosas para nuestros pueblos sin acompanarlas con el establecimiento de un ejercito regular revolucionario(no milicias amateur), seguiremos coleccionando golpes de estados y martires, y ya de ambos tenemos suficiente.
Carlos Moreno
Uno de los Abogad@s del Melinka.
La leccion a aprender es simple: si seguimos armados de optimismo emprendiendo reformas beneficiosas para nuestros pueblos sin acompanarlas con el establecimiento de un ejercito regular revolucionario(no milicias amateur), seguiremos coleccionando golpes de estados y martires, y ya de ambos tenemos suficiente.
Carlos Moreno
Uno de los Abogad@s del Melinka.