Desde el pasado 12 de diciembre los trabajadores portuarios de Valparaíso se encuentran movilizados luego de los acuerdos tomados por EPV (Empresa Portuaria Valparaíso), tras la licitación del espigón otorgada a la empresa española OHL y que tiene como consecuencia el despido de 300 trabajadores sin compensación alguna.
Bajo el lema “Nunca más solos” han adherido igualmente a la paralización los puertos de San Antonio y Mejillones, en tanto otros permanecen en el estado de alerta. El jueves 19 se realizó un paro de trabajadores marítimos de dos turnos y el día 20 los lancheros realizaron protestas en contra de las medidas arbitrarias de EPV.
Edison Schultz, Presidente del Frente de Trabajadores Portuarios, denuncia que se realizó un acuerdo de mitigación por cierre del espigón sólo con uno de los sindicatos, dejando fuera a la agrupación que preside y que reúne a 8 sindicatos de los cuales 5 están movilizados. “Nuestra demanda es poder ser integrados al Acuerdo Marco del Plan de Mitigación y que esta incluya a todos por igual: eventuales, continuos y discontinuos”, plantea el dirigente.
Según lo señalado a la prensa, la empresa OHL destinó 20 millones de dólares a EPV para llegar al Acuerdo de Mitigación a distribuirlo entre los trabajadores, pero la imposición de requisitos no permite el beneficio igualitario. “EPV no quiere conversar y miente a los medios periodísticos señalando que acá estamos todos felices; pero nosotros nos levantamos por nuestra dignidad como trabajadores”, agrega Schultz.
Artesanales sin poder trabajar
En los días sucesivos se han sumado a la movilización los trabajadores de la caleta Sudamericana y el Sindicato de Lancheros del Muelle Prat (SINATRAL), quienes se han visto impedidos de desempeñar sus labores producto de una arbitraria medida tomada por la empresa, que enrejó el acceso a ambos lugares.
Si bien hoy los lancheros del Muelle ya pueden ingresar a su lugar de trabajo, los pescadores artesanales siguen sin poder hacerlo luego del mencionado cierre del espigón. Jorge Cáceres, Secretario del Sindicato Ribera de la Caleta Sudamericana, denuncia que el decreto que autoriza el cierre -votado en el Consejo Regional- requiere de la firma del Presidente y que de acuerdo a lo informado por la Gobernación Marítima, ello no ha ocurrido. “La Caleta Sudamericana aún sigue existiendo en los recintos portuarios. Los pescadores no podemos ingresar, los armadores no pueden ir a ver sus naves”, reclama.
Por su parte, el presidente de dicho sindicato, Hernán Espinoza, señala: “Prácticamente hoy estamos sin trabajo. Y somos unos cesantes más gracias al señor Harald Jaeger, quien ha atropellado todas las leyes de la pesca artesanal. Pescadores no podemos ingresar a nuestro lugar de trabajo; no podemos embarcarnos, no podemos salir a la mar y pescar; si salimos, los vehículos que fletean la mercadería no pueden ingresar. Hemos ido a alegar a OHL, pero nos indican que tenemos que hacerlo a EPV: este no nos recibe y nos remite nuevamente a OHL”.
“Aparte de ser cesantes nosotros vivimos el día a día de nuestro trabajo. Ahora, ¿con qué vamos a alimentar mañana a nuestras familias, si no podemos trabajar?”, se cuestiona Juvenal Garrido, pescador artesanal afectado por las medidas de EPV.
Fuente: Ciudad Invisible - Radio Popular Enrique Torres