Placa recordatoria en el lugar del Asesinato |
Joan Alsina Hurtos , España 28 de abril de 1942 - † Santiago, Chile 19 de septiembre de 1973). Sacerdote católico español, asesinado en Chile tras el Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
Hijo de José Alsina y Genoveva Hurtos, una cristiana familia que vivía en una “masía” del pueblo de Castellón de Ampurias.
Llegó a Chile el 30 de enero de 1967 con el propósito de trabajar durante 10 años en este país, en su carisma que era la evangelización del mundo obrero por el que sentía una predilección especial.
Alsina ejercía su ministerio en la Parroquia San Ignacio de San Bernardo y como Jefe de Personal en el Hospital San Juan de Dios al momento del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973. En ese mismo recinto fue detenido por efectivos militares pertenecientes a un Batallón del Regimiento Yungay de San Felipe, el 19 del mismo mes, y llevado detenido al Internado Nacional Barros Arana. Ese mismo día, una patrulla militar lo llevó hasta el sector del puente Bulnes, donde fue acribillado.
El soldado de 18 años que lo asesinó, Nelson Bañados, relató después el fusilamiento con estas palabras:
"Salimos del Barros Arana en jeep. Mi capitán conducía y yo iba atrás con Juan. Juan iba esposado y muy pensativo. No me dijo ni una palabra durante el trayecto ni me dio ningún trabajo cuidarlo. Iba calladito nomás. Él sabía que lo íbamos a matar porque en el Barros Arana se lo habíamos comunicado. Al llegar al puente Bulnes, mi capitán frenó, y yo, como lo hacía con cada uno de los que fusilaba, me bajé, saqué a Juan del furgón y fui a vendarle los ojos, pero Juan me dijo: "Por favor no me pongas la venda, mátame de frente porque quiero verte para darte el perdón". Fue muy rápido. Recuerdo que levantó su mirada al cielo, hizo un gesto con las manos, las puso sobre su corazón y movió los labios como si estuviera rezando y dijo: "Padre, perdónalos..." Yo le disparé la ráfaga y cayó al tiro. Quería dispararle con la pistola pero lo hice con la metralleta para que fuera más rápido. El impacto fue tan fuerte que volteó su cuerpo y prácticamente cayó solo al Mapocho, yo tuve que darle un empujoncito nomás. Otros, a veces, caían al piso del puente y había que levantarlos y echarlos al río. Eran las diez de la noche y de este fusilamiento no me voy a olvidar nunca jamás".
El día 27 de septiembre es encontrado su cuerpo en el Servicio Médico Legal; es sepultado al día siguiente en el Cementerio Parroquial de San Bernardo. Su autopsia indica la causa de su muerte "multiples heridas de bala" y "lesiones apergaminadas en la cara".
El soldado Nelson Bañados confeso su crimen al sacerdote Miguel Llodrá, que investigó personalmente la historia del cura Alsina. Bañados ratificó su versión en el juicio por el asesinato y tiempo después, agobiado por los remordimientos, se suicidó.
El 30 de marzo de 2007, la Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la condena a cinco años y un día de prisión al ex coronel del Ejército, Donato López Almarza, quien dio la orden de asesinar a Joan Alsina.
En su memoria, un consultorio en San Bernardo lleva el nombre Padre Joan Alsina.