DEL 26 DE FEBRERO AL 4 DE MARZO, 2009
Estos días son particularmente interesantes, los efectos de la crisis económica comienzan a repercutir en todos los sectores y si a eso agregamos la conmemoración del día Internacional de la Mujer no podríamos menos que esperar una gran demostración de masas. Solo considerando la cantidad de organizaciones que convocan a los actos para el 8 de Marzo podemos concluir que tendremos miles y miles demujeres en la calle.
Sin embargo los abusos que se registran particularmente en el sector de la hotelería y los servicios, con extensas jornadas de trabajo, amenazas y deficientes fiscalizaciones, unidos a la falta de autocrítica de las personas que activan en el mundo social así como las que integran las diversas organizaciones, permite augurar algo similar a lo que se ha vivido en los últimos años en las diversas jornadas de movilización.
Por tal razón considero oportuno hacer públicas las siguientes reflexiones que son materia de nuestro análisis como organización en una fecha tan importante como lo es el Día Internacional de la Mujer.
Poco o nada cambia hasta el próximo 8 de Marzo, fecha en que se vuelve a repetir el rito.
En los documentos constituyentes de la CGT se estableció que el actor fundamental del proceso son los trabajadores, que mujeres y hombres son explotados y abusados en sus mas mínimos derechos y que el objetivo principal es construir la fuerza propia que se pueda contraponer al predominio, hasta ahora sin contrapeso, del capital.
A nosotras y nosotros, dirigentes sindicales, nos cuesta llegar con nuestra opinión a nuestros compañeros de trabajo, aunque pocas veces lo reconocemos. Hasta nos cuesta explicarnos porque no reaccionan ante tanto abuso, y les reclamamos por la indiferencia y falta de participación en las reuniones. Todo pretendemos arreglarlo con multas.
Sin embargo cuesta mucho reconocer nuestra responsabilidad en este repliegue de la lucha sindical, en este no estar ni ahí de los trabajadores. ¿No será que por alguna razón los que fallamos somos nosotros, que no podemos llegar a la conciencia de nuestros hermanos de clase y sacarlos del sopor en que los tiene el sistema?.
Por alguna razón estamos culpando a otros sin asumir nuestras responsabilidades y eso lo resienten los más abusados. Imagínense, acordar un ingreso mínimo con la autoridad cuando cualquier persona por muy ignorante que sea, concluye que con esa cifra es imposible vivir.
Y que hacemos ahora?, mas que trabajo a la salida de las fabricas vivimos pegados al correo electrónico, hacemos sindicalismo por Internet ignorando que no son tantos los hogares obreros que cuentan con esta tecnología (¿con que plata si apenas les alcanza para comer y medio vestirse?).
Entre muchas otras, aquí hay varias razones que pueden explicar la baja participación. Por lo mismo en esta nueva conmemoración del día internacional de la mujer hagámonos cargo que la tarea empieza en nosotros, los que dirigimos.
De esta escuela, que nos heredaran nuestros lideres y que muchos ignoramos, nacerá la organización de nuevo tipo, esa en que las trabajadoras y los trabajadores serán quienes la llevan, esa que centrará su accionar en las demandas concretas de la clase y que una vez conseguida la organización y ganada la lucha por el pan comenzará, con los mismos que fueron creando y fortaleciendo su conciencia en la lucha diaria, a proyectar la sociedad digna y justa en la que estas inequidades no tendrán cabida.
A cada uno de los lugares donde concurramos arrojemos la semilla de la educación, la organización y la lucha. Pongamos todo nuestro esfuerzo para superar las barreras que la incomprensión ha ido construyendo en la conciencia de nuestro pueblo.