lunes, 29 de julio de 2013

Cierre de ciclo palestino: “Sin memoria no hay resistencia”

                Tras un mes y medio, este domingo 28 de julio se realizó el cierre del ciclo con el film “Cinco cámaras rotas” de Emad Burnat y Guy Davidi. Semanas anteriores se  presentaron las películas “El tiempo que resta” e “Intervención divina” de Elia Suleiman, “Investigación personal” de Ula Tabari y “La sal de este mar” de Annemarie Jacir. El cierre contempló una discusión y conversación con el panel conformado por los académicos del Centro de Estudios Árabes Rodrigo Karmy y Kamal Cumsille, los activistas Nadia Silhi y Doug Smith, y el cientista político Nicolás Chadud.

                Con un auditorio lleno en el Club Palestino, la Coordinadora para el Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) en Chile emitió la última película del Ciclo de Cine Palestino organizado en conjunto con la Federación Palestina. Luego de la presentación del documental “Cinco cámaras rotas”, se conformó un panel compuesto por académicos y activistas quienes además de exponer sus puntos de vista, respondieron preguntas de los asistentes, llamaron a activarse y hacer suya la campaña por el boicot en Chile.

                El filósofo y académico del Centro de Estudios Árabes, Rodrigo Karmy, expresó que “sin memoria y sin sensibilidad, no hay resistencia”, y exponiendo que las ideas fuerzas enfrentadas en el documental recién visto eran por un lado, “la cámara que registra lo sensible y el olivo que es memoria colectiva” y, por el otro, “la máquina del Estado (de Israel), las inmobiliarias y el ejército que imponen el conflicto, un ejército donde todos son iguales y no tienen sensibilidad”.
Justamente, por esa razón es que para el académico la cámara se rompe cinco veces: “porque no resiste la sensibilidad y la memoria” de la resistencia palestina.

El cientista político, Nicolás Chadud, agregó que “esta película desactiva la idea de que Israel es un Estado democrático y de avanzada en Medio Oriente”, ya que muestra justamente la brutalidad de Israel para acaparar tierras ajenas. Chadud llamó a los asistentes a que prestaran atención a las estrategias de Israel para lavar su imagen, porque mientras “viene a Chile la Filarmónica de Israel, el Estado Hebreo asesina a niños palestinos”.

Por su parte, Kamal Cumsille, profesor del Centro de Estudios Árabes de la Universidad de Chile, reflexionó en torno a la pregunta de por qué hay que boicotear al Estado de Israel, a lo que se explayó comentando que “justamente las películas seleccionadas en este ciclo ayudan a dar esa respuesta, porque hemos visto el asesinato de memoria, las políticas de segregación, las políticas criminales, etc.”

El académico espetó que “lo legal y lo ilegal no importa en los palestinos, porque la radicalidad de la situación lo supera”, y agregó que “nos tratan de radicales (cuando hablamos de boicot), pero con la brutalidad de Israel cualquier palestino sería radical”. Por eso llamó a los asistentes a que realicen acciones para que se difunda la campaña que se inició desde la sociedad civil el año 2005 y más gente participe para que se hagan cumplir los derechos humanos a nivel internacional.

“A las élites judío-sionistas el boicot cultural les duele mucho”
La activista Nadia Silhi, expresó, en referencia al documental “Cinco cámaras rotas” que “la que aparece acá no es la lucha épica que nos han enseñado desde chicos, es la lucha de un pueblo, muy diferente a lo que nos dicen, pero es la resistencia que dan todos los pueblos oprimidos”, y  agregó que “la lucha de los pueblos por su tierra y el boicot van de la mano”.
“A las élites judío-sionistas, el boicot cultural les duele mucho”, espetó Silhi, quien recordó que las bases de la campaña del Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel busca “presionarlo internacionalmente hasta que asegure el derecho al retorno de los refugiados palestinos, termine con el estado de apartheid y segregación que viven a diario los palestinos que viven dentro de Israel, y que termine con la ocupación”.

A lo anterior, el activista internacional, Doug Smith, compartió la experiencia que desde la campaña BDS – Canadá tuvieron con el pueblo de Bil in, protagonista en el documental, al lograr detener la construcción del muro con las protestas que todos los viernes rechazan la ocupación hasta el día de hoy.

“Esta fue una lección sobre la capacidad de trabajar en conjunto con los palestinos y evitar que otras instituciones sean las protagonistas”, dijo Smith, quien agregó que “como saben Bil in no es el caso más representativo, de hecho en la película se ven todas las personas muertas que asesinaron en los pueblos vecinos, pero esta historia es un pedacito de victoria, una gota de esperanza que nos hace seguir en esta senda”.

El activista internacional concluyó alertando a los asistentes a no normalizar la ocupación, “hacer que no sea algo común, el apartheid debe ser enfrentado”.
Tras las exposiciones se acordaron nuevas acciones para mantener la difusión de esta campaña y sumar más adherentes que apoyen el respeto a los derechos humanos.

Imágenes integradas 1Imágenes integradas 2

--
Javier Karmy
Periodista